¿Cómo contar un duelo imposible? ¿Por dónde empezar? ¿Dónde terminar?
Hace 25 años la voz de uno de los líderes políticos y sociales más importantes del país fue silenciada. El mismo que le dio vida a Dioselina Tibaná, la indiscreta empleada de la Casa de Nariño, o a Néstor Elí, el vigilante del edificio Colombia, que tenía las mismas contradicciones del país.
Jaime Garzón: el abogado, actor, periodista, político y activista colombiano que hizo reír a millones de personas a través de personajes particulares que revelaron las problemáticas sociales de un país que vive en duelo.
La novela gráfica Garzón, el duelo imposible, escrita por Alfredo Garzón y Verónica Ochoa —en una edición de Rotundo Vagabundo, con el apoyo del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, la Biblioteca Nacional de Colombia y la Fundación para la Libertad de Prensa - FLIP—, no solo destaca por su excepcional valor expresivo en imágenes y su estructura narrativa, sino también por el profundo significado en la construcción de una memoria histórica colectiva.
Alfredo, quien relata la historia de su hermano y la suya propia, despliega una conmovedora conversación con el devenir social y político que esculpió sus propias miradas y sensibilidades, pero también, con los jóvenes del presente quienes han mantenido vivo el ideario de su hermano.
“La idea nace de un deseo mío desde hace muchos años por unir mi oficio de dibujante con el caso de Jaime. Este proyecto fue evolucionando con el tiempo y cuando conocí a Verónica con su obra de teatro Corruptor —que aborda el tema de Jaime— mi idea evolucionó”, comenta Alfredo Garzón y añade que este es el resultado de cinco años de trabajo con un equipo de diseñadores e ilustradores.
El libro tiene más de 3.000 ilustraciones y cobra vida después de cinco años de trabajo, desde que en septiembre del 2019 se trazaron sus primeros bocetos.
“Este libro es un bello testimonio gráfico y poético de un hombre que nos enseñó que podíamos ser libres riéndonos de nosotros mismos. El poder lo eliminó, pero su obra periodística y pública nos sigue dando ejemplo hoy. Gracias, Jaime, siempre gracias”, expresó el ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, Juan David Correa, quien también acompañó el proceso de la novela desde un primer momento.
Además de estar a la venta en las librerías, esta publicación llegará a las 1.550 bibliotecas públicas del país a través de la Red Nacional de Bibliotecas Públicas - RNBP y la Biblioteca Nacional de Colombia - BNC.
La novela gráfica y sus formas de hacer justicia
Además de fusionar las memorias de Alfredo con su hermano Jaime, su vida de niños, su casa familiar y la confrontación con la muerte, la historia también aborda hechos violentos que han marcado la memoria colectiva del país: el trágico asesinato de Gaitán y los hilos invisibles del genocidio político, el trabajo del maestro Humberto Martínez Salcedo y su impacto en el periodismo independiente y el humor político.
También aborda la intersección entre lo educativo, lo cultural y lo comunicacional, la imposición discursiva durante la Guerra Fría y la censura que marcó la historia política del país. Narra de manera afectiva los años de infancia de Jaime Garzón y su perspicacia como educador popular y humorista nato.
Además, afronta con agudeza la infructuosa búsqueda de justicia de Alfredo, sus hipótesis y preguntas sobre el caso sobre los determinadores del crimen, la influencia del narcotráfico en el conflicto armado y el clima ideológico que se instauró a partir del magnicidio de su hermano.
“Todo empezó con generar un primer texto sobre la idea, sobre qué queríamos hacer y por qué queríamos, y de ahí, sumergirnos en el género de la novela gráfica a la cual nos acercamos gracias al club de lectura y dibujo de la Alianza Francesa, liderado por Ricardo Rodríguez en lectura y Nelson Zuluaga en dibujo”, dijo Verónica Ochoa, y agregó más detalles sobre el proceso de producción: “En las primeras páginas que dibujamos nos dimos cuenta de que esto requería de un equipo más amplio, así que empezamos a llamar a otros dibujantes, diseñadores y a un colorista con el que empezamos las primeras reflexiones sobre la paleta de colores, que fue muy interesante”.
Al proyecto se sumó Laura Nepta para organizar metodológicamente el trabajo de los equipos. Más adelante se involucró con la escritura y emprendió todo un proceso de verificación de datos, ampliación de bibliografía y redacción.
Álvaro Duarte, Sergio Palacio, Daniel Martín, Alejandro Guarín, Lucia Duarte, Juliana Ocampo y Alfredo Garzón fueron los miembros del equipo de dibujo. El diseño y color estuvieron a cargo de Felipe Rivera; la producción e investigación, de Laura Nepta y la escritura, de Verónica Ochoa.
Ficha técnica:
Título: Garzón El duelo imposible.
Autores: Alfredo Garzón/Verónica Ochoa
Formato: 19x26 cm cerrado.
Páginas: 564.
Papel: Bond 115 g.
Tintas: 4x4.
Encuadernación: tapa dura.
Adicionales: 2 desplegables de 58,5x26,5cm y 1 desplegable 39 x 26,5cm
p.v.p: $ 169,000