La novela Crónica de una muerte anunciada apareció en 1981 con un gran despliegue mediático y editorial que incluyó un millón de ejemplares en español y la traducción del libro al quechua, realizada por Alfredo Costales. Las obras de García Márquez y del peruano Mario Vargas Llosa fueron escogidas en 2015 por el Ministerio de Cultura de Perú como las primeras obras completas que se traducirán a ese idioma como parte de una campaña de divulgación de esta lengua hablada por más de diez millones de personas en los Andes sudamericanos.