Poetas

Nacida en la esclavitud, con el nombre de María Cristina Fragas, nació en 1856 en la ciudad de Güines (Cuba); adoptó el seudónimo Cristina Ayala, lo que le permitió crear una nueva identidad literaria y abandonar el nombre que había recibido de su dueña. Ayala es reconocida como una de las voces más excepcionales de la literatura escrita por afrodescendientes en América Latina no sólo por haber nacido en cautiverio, sino porque a través de su labor literaria se convirtió en vocera de la lucha de los afrocubanos por obtener derechos civiles e integrarse a la vida política de su país.

Comenzó a escribir poesía a los siete años. A partir de 1885 y hasta su muerte, en 1936, publicó poemas, sonetos y baladas en más de veinte periódicos cubanos. Su obra poética puso al descubierto la interrelación entre los discursos de género, raza y nación dominantes en la época. La reivindicación racial es un tema central en su poesía, que utilizó como medio para oponerse a los discursos dominantes en la época y para exhortar a los afrocubanos a reclamar el reconocimiento de su participación en la construcción de la nación.

Nació en La Habana (Cuba) en 1963. Es graduada en Filología por la Universidad de La Habana y trabaja como investigadora auxiliar en el Centro de Estudios Martianos desde hace más de dos décadas. A pesar de contar con una vasta producción, tanto literaria como investigativa, y de haber recibido múltiples premios nacionales, es una de las poetas afrocubanas contemporáneas, residentes en la isla, menos atendida por la crítica dentro y fuera de Cuba. Su producción incluye ocho libros de poesía y numerosos ensayos críticos sobre la obra de José Martí.

Atencio pertenece a una generación, la primera nacida dentro del periodo revolucionario, que no estuvo sujeta a estrategias de enunciación que hicieran explícito el nivel de compromiso patriótico del autor. La autora se identifica a sí misma con una poética concreta: “Algo de lo más destacado o que más relevancia tuvo en el sentido de fenómeno social, no género literario, de mi generación fue el Grupo Diáspora, muy bien recibido por la crítica oficial de poesía en el país”.

Nació en Caracas (Venezuela) en 1967. Es poeta, editora, gerente cultural y productora artística. Su carrera literaria empezó a temprana edad, desde la primaria, cuando fabulaba y escribía cuentos. Estudió Letras en la Universidad Católica Andrés Bello y allí tuvo la oportunidad de profundizar su conocimiento sobre el arte y los escritores clásicos. De ahí creció su pasión por la lectura, la literatura y la poesía. Sin embargo, su vocación de poeta surgió cuando trabajaba en La Casa de la Poesía Pérez Bonalde, donde trabajó como gerente y productora. En 2005, recibió la Mención Honorífica del III Premio Nacional del Libro con Mieles.

La temática de su obra gira en torno a lo religioso y lo espiritual, los ancestros, los rituales, la infancia, la mujer, la vejez y el sueño. Arocha no limita su vocación poética a la investigación o teorización de lo étnico-racial ni a forzar la exposición de sus orígenes en sus versos, sino que parte de la experiencia personal y colectiva para conocerse a sí misma, universalizarse y filosofar sobre el destino del ser humano en general.

Nació en Montevideo (Uruguay) en 1959 y es una de las más destacadas escritoras afrodescendientes vivas del país. Actualmente reside en Estados Unidos, donde hizo sus estudios de posgrado: una maestría en la Universidad de Indiana (Pennsylvania) en 1999 y un doctorado en la Universidad de Missouri (Columbia) en 2004. Su obra es estudiada principalmente por académicos norteamericanos; sus poemas aparecen en revistas como Afro-Hispanic Review, y el grueso de su actividad artística y docente se desarrolla fuera de Uruguay. A pesar de su notoriedad en el ámbito internacional, la obra de Rodríguez Cabral es escasamente estudiada en su país de origen.

Para Cristina Rodríguez Cabral la poesía es una trinchera, un espacio de memoria (de los ancestros, de su pasado familiar), una forma de resistencia al machismo y el racismo y una forma de decirse mujer. Su actividad literaria provino de su militancia social, cuando comenzó a publicar a inicios de los años noventa. Hoy, Rodríguez Cabral asegura que la poesía es su forma de compromiso social.

Nació en Colón (Panamá) en 1965, y creció en Costa Rica, donde se formó académicamente, ha escrito su obra y alcanzó su madurez poética. En el ámbito poético se ha esforzado por recuperar la memoria de la herencia africana desde su subjetividad de mujer afroantillana, posicionada en el corazón de las Américas. Su obra muestra la capacidad de autocrearse, de construir su propio espacio y escribirse a sí misma dentro de una identidad nacional que la excluye y la margina.

McDonald escribe para preservar la memoria histórica y conciencia identitaria del pueblo afroantillano con el cual se identifica. Su obra incluye los poemarios El séptimo círculo del obelisco (1994), Sangre de madera (1995) y La lluvia es una piel (1999), además de la antología Instinto tribal (2006).

Nació en 1963 y es conocida como “La Palmera”. Es poeta y cantautora; su talento excepcional se manifiesta en el espacio público (festivales, eventos culturales, congresos y conferencias) y en el literario. El amor por los versos y la canción le viene de su abuela y su madre, cantadoras de oficio. Ha recibido múltiples reconocimientos por su labor artística y sociocultural. En 2007, Águeda Pizarro de Rayo la designó, junto a María Teresa Ramírez y Mary Grueso Romero, como Almanegra —el más alto reconocimiento otorgado a las mujeres poetas colombianas que han logrado excelencia en su obra poética—. Su obra proviene de su experiencia personal, de la naturaleza del Pacífico y de algunas influencias e inspiraciones literarias externas.

En los años 2012 y 2013 fue designada como coordinadora del Comité de la Afrocolombianidad de Buenaventura, instancia desde la cual impulsó la conmemoración del mes de la afrocolombianidad, en el que organizó un conjunto de estrategias que contribuyen a visibilizar y reconocer los aportes de los afrocolombianos al desarrollo de la nación y del mundo.

Poeta afrocubana nacida en La Habana (1946-1999). En su obra se ve el florecimiento del mestizaje caribeño y la necesidad de abrir un espacio para ella y los suyos dentro de la literatura cubana, y se destaca su compromiso político con la Revolución y las relaciones familiares recreadas sus libros. La autora ha dedicado gran parte de su trabajo a escribir para el público más joven, por lo que ha recibido diferentes premios literarios, entre ellos el Ismaelillo en 1979, La Edad de Oro en 1984 y La Rosa Blanca en 1984 y 1987.

Saldaña rompió parcialmente con la poesía de la generación anterior, y su producción ha sido elogiada por el dominio que tenía de las diferentes formas métricas, además de las relaciones intertextuales con obras y autores de otras literaturas, al mismo tiempo que utiliza todo su acervo cultural para crear valor desde el punto de vista literario y reafirmar el carácter mestizo de su cultura.

Nacida en 1936, esta cubana con padres de origen africano aparece en todas las antologías de poetas y creadores de la isla, y es una de las escritoras afrocubanas más traducidas, gracias a la manera en que desarrolla temas como la identidad femenina y de raza en sus poemas; para ella, la poesía es una necesidad que lleva en la sangre, en los latidos del corazón.

Herrera ha publicado en medios de comunicación cubanos e internacionales y ha recibido un sinfín de reconocimientos, entre ellos, la estatuilla mexicana Coatlicue, otorgada a las mujeres con una destacada obra artística; el Estado cubano la condecoró en 2002 con la Medalla Alejo Carpentier, e incluso llegó a ser presidenta de la Sección de Radio de la Asociación de Radio, Cine y Televisión y miembro de la Sección de Literatura (UNEAC).

Escritora y poeta afroargentina nacida en 1860. De origen africano, logró un momento de visibilidad, aunque por muy corto tiempo. Nieta de esclavos negros, vivía a fines del siglo XIX en un viejo convento de Buenos Aires junto a su madre. Se ganaba la vida como correctora de pruebas de un diario.

No poseía ningún libro, pero leía habitualmente los autores clásicos, sobre todo los latinos, aspecto que influenció su estilo de escritura y su expresión neoclásica. En su producción se destaca su admiración por la cultura grecolatina, alejada en tiempo y espacio, y tan diferente a la realidad que la rodeaba. Sus versos cantan a un ideal, a una utopía en la que la mitología griega y sus héroes son el deseo de una edad dorada donde el dolor se sublima en lo heroico, al igual que en la cantata.

Narradora, escritora, directora de teatro, actriz, bailarina y “perfomancera” domínico-americana. Nació en 1960 en La Romana (República Dominicana). Llegó a los Estados Unidos en 1972 e hizo sus estudios secundarios en la ciudad de Nueva York. Más adelante decidió seguir un camino independiente en su formación y desde 1980 ha estado viajando a Rusia y a la India para investigar y aprender sobre la biomecánica de teatro (método de entrenamiento actoral). La carrera de Báez como escritora y actriz está profundamente influenciada por su cultura de origen dominicano y su transformación en la diáspora. Los elaborados rituales de la Semana Santa católica y las procesiones en las calles de La Romana fueron las primeras fuentes de su experiencia con el arte del performance.

Su producción artística tiene raíces en cinco temas: su espíritu, su género, su color de piel y rasgos físicos, sus orígenes humildes y su condición de inmigrante. Báez es, además, una de las pioneras de la literatura y el teatro enfocado en la experiencia de los inmigrantes dominicanos en los Estados Unidos, especialmente el área de Nueva York. La narración, el teatro, la poesía y los textos para performance son algunos de los medios que le permiten explorar y reflexionar sobre los mecanismos de negociación de los dominicanos en un entorno transnacional.

Nació en Puerto Rico en 1914 y fue encontrada muerta en las calles de Nueva York en 1953. Burgos desarrolló una enorme conciencia política y formó parte de las Hijas de la Libertad, rama femenina del Partido Nacionalista de Puerto Rico. Obtuvo su título de magisterio en la Universidad de Puerto Rico a los 19 años de edad, y su amor por la literatura la llevó a escribir poesía. El 19 de febrero de 1987, el Departamento de Español del Recinto de Humacao de la Universidad de Puerto Rico la homenajeó concediéndole un póstumo doctorado Honoris Causa en Letras y Humanidades.

Sus temas más recurrentes fueron el feminismo, la naturaleza, la negritud y temas existencialistas o sociales y políticos; en su poesía, estos temas están totalmente fundidos, y se ven representados a través de un lenguaje directo, posmodernista y desprendido de cualquier rebuscamiento poético.

Charún-Illescas es escritora e investigadora de la cultura afroperuana. Nació en 1950 en Lima (Perú), ha vivido en diferentes ciudades de Estados Unidos y Europa, y actualmente está radicada en Alemania. En su juventud estudió Ciencias de Comunicación y dedicó una época de su vida al periodismo. También realizó estudios de cine. En 1995 publicó el libro Lateinamerika in Hamburg (Latinoamérica en Hamburgo) en alemán y en 2001 publicó la primera novela afroperuana titulada Malambo, muy bien recibida por la crítica y sobre la cual muchos académicos y críticos literarios han escrito y publicado estudios.

En 2013, durante el Mes de la Cultura Afroperuana, el Ministerio de Cultura de Perú le otorgó la distinción Personalidad Meritoria de la Cultura. Ha publicado artículos y cuentos cortos en revistas y ha contribuido al suplemento dominical del periódico El Comercio de Perú y a otros diarios. Aporta a la página Sankofa Perú: Afromemorias, dedicada a compartir material sobre África y la diáspora africana.

Nació en Santa Fe (Argentina) en 1949. Es una tenaz defensora de los derechos humanos, conocida por su activismo y por ser portavoz de los afrodescendientes y de los pueblos nativos. Es una “afroargentina del tronco colonial”, es decir, que desciende de negros africanos que sufrieron la tragedia de la esclavitud en las colonias españolas. En marzo de 1988 fundó, junto con su esposo Mario Luis López, la Casa de la Cultura Indo-Afro-Americana, en Santa Fe (Argentina), donde se llevan a cabo actividades educativas y culturales.

Su producción poética es menos difundida que su prosa. Algunos de sus poemas aparecen en antologías, mientras que otros permanecen inéditos. Sin embargo, su poesía es inseparable de los contenidos que definen sus ensayos en la lucha por el reconocimiento de los afrodescendientes. La problemática de la identidad africana frente a las políticas nacionales de “blanqueamiento” y la articulación de la voz de los afroargentinos son la base de su producción literaria, en la que los temas de discriminación de los descendientes de esclavos negros van de la mano con su militancia.

Nació en Esmeraldas (Ecuador) en 1940. Ha sido una de las escritoras más prolíficas de su país y se ha destacado a lo largo de los años por su trabajo como literata e incansable defensora de los derechos de la comunidad afrolatinoamericana, las minorías y la mujer. Su producción literaria abarca géneros como la novela, la poesía y el relato, y su obra ha sido traducida a varios idiomas, incluyendo traducciones de su poesía al quichua. Ha sido invitada a numerosos encuentros de escritores y poetas alrededor del mundo y a varias ferias internacionales del libro.

Su obra figura en varias antologías nacionales y extranjeras, entre las cuales se destacan Between the Silence of the Voices (1997), Antología de narradoras ecuatorianas (2005) y Poetas de la mitad del mundo (2013), entre otras. Ha sido merecedora de innumerables premios por su labor y su trayectoria, como el Premio General José de San Martín en 1985, el Illescas de Oro en 2011, la Medalla Bicentenario al Mérito Cultural del Ministerio de Cultura de Ecuador en 2012, la condecoración Aurelio Espinosa Polit, destinada a personalidades destacadas en el mundo de la literatura, también en 2012, y el premio Mujer del Año en 2013.

“Chiqui” Vicioso nació en 1948 en República Dominicana. Es hija de la poeta María Luisa Pérez Sánchez, única poeta postumista del país y de Juan Antonio Vicioso Contín, alias Tony Vicioso, que era también poeta, musico y pintor, hijo a su vez de otro poeta, Juan Antonio Vicioso Vargas. Fue dirigente nacional de la Juventud Estudiantil Católica, lo cual la llevó a trabajar en los barrios marginados de Santiago de los Caballeros, alfabetizando. Ahí nació su vocación religiosa —pensó en volverse monja—, que se hizo trizas cuando rechazaron a dos de sus compañeras de noviciado por ser "hijas naturales". Estudió Sociología e Historia en Brooklyn College (CUNY) e hizo su maestría en Educación en Columbia University —la educación fue definitiva en su proceso de autorreconocimiento—. Es en Nueva York donde realmente adquiere su visión caribeñista, feminista, no sexista y racial de lo que es.

Vicioso tiene una amplia carrera literaria y ensayística, que empieza en 1981, y hasta la fecha comprende poemarios, obras de teatro y ensayos críticos, a través de los cuales se afirma como una de las voces más representativas de la literatura dominicana contemporánea. Es promotora de escritura femenina; trabaja por la igualdad de género en el ámbito intelectual de su país, y su actividad literaria incluye la fundación del Círculo de Mujeres Poetas, primer espacio real de la literatura femenina en la isla.

Esta escritora colombiana nació 1944 en Corinto (Cauca) y creció en Buenaventura. Se graduó de Licenciatura en Historia y Filosofía en la Universidad del Valle y ha trabajado como maestra en diversos colegios de Cauca y Valle del Cauca. Ha publicado cuatro libros de poesía: La noche de mi piel (1988), Abalenga (2008), Flor de Palenque (2008) y Mabungú. Triunfo (2011).

La propuesta artística de Ramírez es un intento por reunir y consolidar las diferentes huellas y voces del pasado afrocolombiano. En sus textos se activa la memoria colectiva y es posible reconocer temas, imaginarios y discursos actuales y ancestrales. En los recitales de Ramírez, la voz, el cuerpo y el atuendo africano conforman una dinámica cultural de gran profundidad ritual que actualiza dichos legados; por esta actividad, ha recibido el título de Huracana de la Poesía.

Nació en 1964 en Montecristi, ciudad fronteriza de la República Dominicana, pero su niñez y gran parte de su juventud transcurrió en Bonao. Estudió Derecho y Educación en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra. En 1999, se graduó de Artes Liberales en Norwalk Community College, Connecticut (Estados Unidos). En el año 2000 completó una licenciatura en Human Services/Women’s Studies en SUNY State College. Trabajó desde 1993 hasta 1996 en la Casa Cultural Julia de Burgos, adscrita a Yale University. Logró su título de Maestría en Consejería en 2003 y su PhD en Psicología en 2006. Trabaja con problemas psicológicos en individuos y familias, y usa la poesía y la literatura como medios terapéuticos.

Ha publicado varias colecciones de poemas, entre ellas Oficio de vivir (1986), Los alegres ojos de la tristeza (1987), Regando esencias/The Scent of Waiting (1998), Curada de espantos (2002) y Diosas de la yuca (2011), y, junto con Miriam Mejía, publicó una antología de historias de vida de ocho poetas dominicanas: La palabra rebelada/revelada. El poder de contarnos. Junto con Juleyka Lantigua compiló una antología que recoge algunas de las voces poéticas que han participado en la serie literaria Confluencia, que dirige desde el 2008 en Naugatuck Valley Community College en Waterbury, Connecticut.

Poeta y ensayista nacida en Veracruz (México). Gasca Posadas es una literata muy prolífica: ha publicado un poemario, un epistolario y 16 antologías, con las que ha logrado renombre internacional. Algunos de sus poemas han sido traducidos al náhuatl, zapoteco y catalán. También tiene una extensa obra inédita. Sigue impulsando la cultura en las zonas más marginadas de su pueblo natal, especialmente a los niños. Ha dedicado su vida a impulsar la cultura y a promover sus raíces; en sus obras destaca su herencia familiar, su herencia africana, su amor por México, por su dios, por su gente, sus tradiciones y su naturaleza.

Nació en 1970 en Apartadó, un municipio antioqueño localizado en el golfo de Urabá (Colombia). Es psicóloga social comunitaria de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia y filóloga hispanista de la Universidad de Antioquia. En 2014 se graduó de la Maestría en Comunicación y Educación Audiovisual en la Universidad Internacional de Andalucía. Ha publicado más de una docena de libros de poesía y ha obtenido importantes reconocimientos como la Beca de Creación en Poesía (2011).

Para Quiñónez, la poesía es un diálogo constante. Su obra es testimonial, personal y colectiva; es una reescritura de su experiencia en el mundo, de los amores y desamores, de la orfandad en que se encuentra la humanidad. Es una poesía que busca desestabilizar, incomodar y sorprender con una plasticidad que causa asombro y es a veces devastadora.

Matilde Ezeiza fue una payadora afroargentina que vivió a principios del siglo XX. Poco se conoce sobre su vida, ya que no se sabe si fue hija natural de su padre o hija legítima que utilizaba el seudónimo “Matilde” para su vida profesional. Un folleto de marzo de 1917 contiene un listado de sus canciones, que se vendía como literatura para un lector emergente. El título La hija del payador: Hermosa colección de canciones cantadas por Matilde Ezeiza en la tumba de Ezeiza hace referencia a su padre Gabino Ezeiza, uno de los más reconocidos payadores de la época. Fue gracias a su posicionamiento como hija de Ezeiza que Matilde pudo abrirse campo en la escena payadoril, predominantemente masculina.

Las canciones de Ezeiza, siempre conocida como “La Hija del Payador”, hacen referencia a la experiencia de ser una mujer negra en una Argentina preocupada por el blanqueamiento sociocultural. Su éxito como escritora y cantante es un triunfo, no sólo por ser afrodescendiente sino también mujer y de clase baja.

Nació en Carolina (Puerto Rico) en 1966. Comenzó a escribir a los ocho años y es considerada la escritora negra que más visibilidad ha tenido en el mundo de las letras hispanas. Como gestora cultural ha sido responsable de dar visibilidad a muchos escritores y es común su presencia en escenarios locales de la isla, en congresos internacionales. Santos-Febres ha sabido utilizar su fama y los distintos medios, desde la televisión hasta las redes sociales, para generar entusiasmo y activismo dentro y fuera de Puerto Rico.

Aunque se inició como poeta, su nombre comenzó a circular por América Latina y entre académicos y estudiantes en Estados Unidos gracias a su faceta como novelista. Serena Selena vestida de pena (2000), finalista del Premio Rómulo Gallegos, es un acercamiento refrescante a la narrativa del Caribe hispano. Cuenta con cuatro poemarios publicados: Anamú y manigua (1991), Tercer mundo (2000), Boat People (2005) y la colección Instrumentos de medición (2010). Su narrativa es una búsqueda en su propia persona, en su origen, su negritud, su cuerpo, su feminidad, su gente, a quien nombra como su tribu, y a otras mujeres, las llamadas “guerreras” que la han inspirado.

Nació en La Habana (Cuba) en 1944. Pertenece a la segunda generación de escritores surgida en el periodo posrevolucionario en Cuba. Es una figura clave en las letras latinoamericanas y cuenta con más de cuarenta colecciones de poemas, además de múltiples antologías y traducciones en más de doce lenguas; su obra ha cruzado fronteras culturales e ideológicas extendiéndose por toda América y Europa. Ha recibido múltiples galardones y títulos, entre ellos, el Premio Nacional de Literatura (2001); el Premio de Poesía Corona de Oro, en el XLV Festival Internacional de Poesía de Struga, en Macedonia (2006); el doctorado Honoris Causa de la Universidad de Cergy-Pontoise, en París (2009), y fue elegida como presidenta de la Academia Cubana de la Lengua.

Su poesía comenzó a ser conocida a partir de la antología bilingüe Where the Island Sleeps Like a Wing, de 1985. Más tarde, en 2003, publicó otra antología bilingüe que cubre 47 años de su creación: Looking Within: Selected Poems/Mirar adentro: Poemas escogidos, 1954-2000, libro que se convirtió en best seller.

Nació en 1964 en Puerto Barrios (Guatemala). Murillo tiene una maestría en Antropología Social, ha sido profesora de primaria y trabajadora social, y actualmente se desempeña como coordinadora de la carrera de Trabajo Social en la Universidad de San Carlos. Además, ha ganado premios literarios por su creación poética.

Su obra trata la figura de la mujer política y la búsqueda por su identidad como mujer garífuna, una etnia del Caribe y de Centroamérica que ha ido desvaneciéndose de la memoria colectiva. También trata temas como la guerra, la patria y los grupos sociales marginados. Murillo resalta la importancia de las raíces africanas y el mestizaje como partes fundamentales de su identidad. Sus poemarios siempre impulsan la sororidad y el empoderamiento femenino. Entre los libros que ha escrito están Abrir la puerta y Sur desterrada.

Salomé Ureña (1850-1897) nació en Santo Domingo, República Dominicana. En la sociedad de su época, cerrada e insular, estudió en el recinto de la casa bajo la tutela de su madre. Comenzó a escribir poesía de niña y, ya adolescente, leyó varias de sus composiciones en la Sociedad Amigos del País, que suscitaron comentarios negativos propios de la época sobre el hecho de que una mujer escribiera poemas patrióticos, probablemente escritos por su padre. Pudo publicar varias de sus composiciones en periódicos y se hizo famosa bajo el pseudónimo de “Herminia”. En 1878, fue catalogada como la más grande poeta dominicana, patriota y progresista, y en 1880, la misma Sociedad Amigos del País le publicó sus Poesías, edición que contiene unos 35 poemas.

Aunque Salomé nunca salió de República Dominicana, su nombre llegó a ser conocido en otros países de Hispanoamérica. Su producción literaria disminuyó después de haber contraído matrimonio, pero se mantuvo activa en la enseñanza con la fundación de la primera Escuela Normal para mujeres en la República: el Instituto de Señoritas, en 1881.

Poeta afro representante de la tercera generación de descendientes jamaicanos en Costa Rica. Nació en San José en 1965, en el seno de una familia de mujeres de gran relieve social. Estudió Literatura, Dramaturgia y Creación Literaria en el Conservatorio de Castella; Antropología en la Universidad de Costa Rica (2003), y se especializó en feminismo e historia africana a través de cursos de posgrado en la Universidad de Zimbabue en Harare.

Forma parte de diversos programas culturales y sociales que estimulan la creación literaria en Costa Rica, El Salvador y Honduras. Docente en el mismo conservatorio donde recibió su formación, invierte gran parte de su tiempo dictando conferencias, diseñando talleres y recitales poéticos para niños y jóvenes y contribuyendo a los procesos de movilización y concientización de las comunidades afrodescendientes en favor de la inserción social de la mujer negra y de la interculturalidad en América Latina.

Poeta, compositora, coreógrafa y profesora, Victoria Eugenia Santa Cruz Gamarra nació en Lima en 1922 y falleció en 2014. Es reconocida como la primera mujer afrodescendiente en el Perú dedicada a promover la cultura afroperuana a través del arte y la docencia.

Un amargo episodio ocurrido durante su niñez la llevó a escribir una de sus composiciones más famosas: el poema rítmico “Me gritaron negra”, en el que recuerda que de niña se mudó a su barrio una familia de tez blanca, y una tarde, la nueva vecina —una pequeña de cabellos claros— les advirtió, con arrogancia, a sus amigas: “Si esa negrita juega, yo me voy”. Santa Cruz nunca imaginó que sus amigas fueran a preferir a la recién llegada, como ocurrió. Ya en la adultez interpretó en más de una ocasión a esta niña rechazada por su color de piel y, de esta manera, le otorgó voz a un brusco despertar: a la toma de conciencia de la dolorosa realidad que su condición de negra implicaba.

Nació en Montevideo (Uruguay) en 1908 y murió en Argentina en 1958. Su obra fue publicada entre 1930 y 1950, cuando surgió un movimiento literario, social y político de enorme importancia para la historia afrodescendiente de Uruguay. Brindis de Salas es la primera y única poeta negra, quizás, de esta región que se presentó con un libro lleno de rebeldía, conciencia revelada y alerta, para mostrar su posición de lucha.

En ese sentido, la poesía de Brindis de Salas acompaña las tendencias hegemónicas de la poesía uruguaya en relación con la poesía española, y aporta otras fuentes vinculadas a la diáspora africana en el Caribe hispánico. Su obra incorpora a la poesía uruguaya la perspectiva de una mujer afrodescendiente y, a través de ella, de todo el colectivo afro.

Xiomara Cacho Caballero nació en 1968 en Punta Gorda (Roatán), una isla en el mar Caribe perteneciente a Honduras. Cacho Caballero es licenciada en la enseñanza del idioma inglés y tiene una maestría en Educación en Derechos Humanos. Es la representante de la comunidad garífuna en el Programa Nacional de Educación Bilingüe Intercultural.

Esta poeta es la única autora centroamericana que escribe poesía y narrativa en garífuna. Su primer libro es Tumálali Nanigi/La voz del corazón/The Voice of the Heart (1998) y, por la confluencia de culturas en su hogar en Roatán, muchas veces escribe sus poemas y los títulos en los tres idiomas que domina: español, inglés y garífuna. Los temas de su obra son la pérdida de identidad, la fragmentación de la conciencia y la lucha por conservar la memoria de su etnia a pesar de las adversidades, todos transversalmente conectados por la vivencia de la mujer afro en el mundo.

Yolanda Arroyo Pizarro, nacida en Guaynabo (Puerto Rico) en 1970, es una de las figuras más reconocidas de la literatura puertorriqueña contemporánea. En el 2004 comenzó su vasta bibliografía de publicaciones y, desde entonces, ha escrito sin parar. En 2007 fue seleccionada para el Bogotá 39 —reunido por el Hay Festival de Colombia y la Unesco— como parte de la generación de los treintainueve escritores más significativos de la actualidad, menores de treintainueve años de edad en Latinoamérica.

No hay duda de que la diversidad de géneros literarios, junto con la temática transgresora de sus escritos, hacen que Arroyo Pizarro sea reconocida como una de las nuevas voces potentes de los últimos años en la literatura de lengua hispana. Sus obras dramáticas, ensayos, narrativas, poesía, el blog y la revista literaria que dirige —ambas con el mismo nombre de Boreales— son evidencia del eje principal de sus creaciones literarias, que giran en torno a la resistencia de ideologías racistas y heteronormativas, tanto en Puerto Rico como en el resto del mundo. Efectivamente, sus temas más comunes parten de su propia identidad y compromiso político, definido en gran parte por su conciencia como mujer afropuertorriqueña y lesbiana.

Esta poeta colombiana nació en 1948 en Tumaco (Nariño). Eligió para su obra el haikú y otras formas de poesía breve. Es autora de tres poemarios de poca circulación: La riqueza de mi ser (1997), La palabra sagrada: poesía haikú (1998) y Pensamientos y poemas mensajeros (2000). Su vocación de silencio y su canto tímido llaman la atención en esta poeta que vive, oye, observa y escribe su poesía en el puerto de Buenaventura.

Su lirismo está anclado a una estética extraña para la poesía colombiana en general y sus versos entran en la insularidad que caracteriza la tradición del haikú en Colombia. En Zulma Prado no se encuentra la sensualidad abierta ni el ritmo fácilmente identificable; tampoco los rasgos de oralidad que dan a la elocución escrita un tono particular, como mímesis de una concepción cultural compleja.

Originaria de Livingston, Izabal (Guatemala), nació el 5 de agosto de 1962 y es parte de la comunidad garífuna guatemalteca. Es egresada de la Universidad Rafael Landívar. A pesar de que no tiene libros publicados, sus poemas se han compilado en antologías y ensayos de crítica literaria feminista de Rossana Estrada Búcaro y Consuelo Meza Márquez. En su poesía se identifica como mujer y como afrodescendiente; hace alusión constante al color de la piel de su etnia y a su vivencia femenina.

Haye Francis se resiste a ser invisibilizada por la cultura mestiza centroamericana, que rechaza al afrodescendiente por su color de piel. Por medio de sus poemas, la autora reconoce el papel de las mujeres ancianas como transmisoras de la cultura y la memoria garífuna y la lucha por mantenerlas vivas en un país como Guatemala, en el que esta etnia es una minoría poblacional.

Isabel Reyna Estrada Colindres nació el 19 de noviembre 1953 en la comunidad de La Fe, en Nicaragua. Se identifica con la etnia garífuna y es miembro de la Iglesia católica. Su niñez transcurrió en su comunidad natal, pero, a los 12 años, sus padres decidieron enviarla a Bluefields a estudiar la primaria en la escuela Hogar y la secundaria en el Instituto Nacional Cristóbal Colón. Enfermera profesional y socióloga, trabaja en el área de educación de VIH en la Asociación Campaña Costeña Contra el SIDA y vive en el barrio San Mateo de la ciudad de Bluefields.

Comenzó a escribir poesía en 1992. Su inicio en la escritura surge después de visitar Belice, donde se da cuenta de que los integrantes de su etnia tienen los mismos derechos que las demás personas. Comienza a sentirse orgullosa de quién es y de dónde viene, lo que después se reflejará en su obra. Escribe en inglés, creole y español. Disfruta escribir poesía, que después lee con pasión. Sus temas tienen como origen la historia y la cultura garífunas; sus poemas también reflejan su gusto por las plantas y el cuidado del medio ambiente. Sus poemas han sido incluidos en antologías, entre las que se destaca el libro Orinoco: Revitalización Cultural del Pueblo Garífuna de la Costa Caribe Nicaragüense (1999).

Obtenida de Memoria centroamericana