Luego de 39 años desde su primera edición, la Biblioteca Nacional de Colombia – BNC publica, en su Biblioteca Nacional Digital, el libro Celia se pudre, de Héctor Rojas Herazo.
La novela —llena de cultura, paisajes y memorias del Caribe— puede ser consultada en: Colecciones - Celia se pudre
De acuerdo con el prólogo de la obra, Celia se pudre es un “mural americano”. La novela es un collage de experiencias vividas, que tejen un mundo que oscila entre la realidad y la fantasía, sin una división clara. Es una mirada al pueblo y al sentido de pertenecer a un lugar.
Para esta reedición, la BNC hizo una alianza con la Fundación IriArtes, editores del libro. Agradecemos el trabajo colaborativo y la donación de 200 ejemplares para las bibliotecas públicas del país.
Sobre el libro y su autor
Héctor Rojas Herazo (1921-2002) fue un escritor, poeta, periodista, autodidacta y pintor colombiano. En los años 40, inició a trabajar en periódicos como El Relator, El Heraldo y El Universal. Rojas fue un narrador y, considerado por muchos, una de las figuras centrales de la literatura colombiana, gracias a su labor por modernizar nuestras letras, junto a autores como Gabriel García Márquez y Álvaro Cepeda Samudio.
En 1986, se publicó Celia se pudre, el último libro de la trilogía que incluye a Respirando el verano (1962) y con En noviembre llega el arzobispo (1967). Celia se pudre es un libro que constituye un proceso creativo que va más allá de cualquier novela colombiana en el siglo XX. Es una novela no lineal que esta tejida por emociones, cuerpos, mujeres y multitudes que atraviesan dos planos de la realidad; y por memorias que enlazan sensaciones y no ideas.
En esta novela, “la ciudad y el cedrón existen paralelamente”, brinda una experiencia cercana a la cotidianidad del Caribe, fusionándose con la ficción y la realidad de una sola historia. Celia se pudre es capaz de transmitir emociones, olores y recuerdos que transcurrirán junto a “los muertos que miran el pueblo desde su ventana”, como dice Juliana Enciso en el prólogo. Esto mientras Rojas construye un lugar íntimo junto al tiempo y mamá Celia.
Celia es la representación de un pueblo que se quedó esperando por el cambio, la voz del tiempo que se va degradando junto a sus olores y sentidos. Celia se pudre es un libro que no solo es fantástico por su uso del tiempo, sino también, por la exaltación sobre la importancia de un lugar como el Caribe y la historia detrás del tiempo fantástico que ayuda a recorrer más allá de los pensamientos.