- RNBP – Biblioteca Nacional – Área de Formación
La Red Nacional de Bibliotecas Públicas de Colombia, en cabeza de la Biblioteca Nacional y su área de Formación, ha conformado un equipo que se encarga de planificar y ejecutar cada acción referente al proceso. El propósito es trabajar para que los seminarios de formación sean espacios que permitan la reflexión por parte de los bibliotecarios, para que los instrumentos de acompañamiento, seguimiento y evaluación se implementen de la manera adecuada y, en general, para que el proyecto se desarrolle de la mejor manera posible en cada biblioteca pública municipal donde se implementa.
En síntesis, se busca que el proyecto cumpla con todas las condiciones de calidad y pertinencia que se tienen en cuenta para el desarrollo de todos los proyectos del área de Formación: crear espacios para el encuentro alrededor de la palabra oral y escrita, para la circulación de materiales diversos y de calidad, para el reconocimiento de la diversidad y las necesidades de lectura e información de las comunidades y para la estimulación de transformaciones positivas a largo plazo de las representaciones y prácticas de lectura y escritura de sus participantes.
Los bibliotecarios son actores fundamentales dentro del proceso, pues son los encargados de la ejecución directa de este en las bibliotecas públicas. Por esta razón, hacen parte de cada uno de los momentos que integran el prototipo de intervención del proyecto. Son los responsables de leer en voz alta y de generar espacios para la conversación sobre los textos que se leen y, en este sentido, de crear espacios amables donde los niños se sientan cómodos, no solo para acceder a la biblioteca y a la lectura, sino al goce estético y a la conversación.
Los niños en edad escolar que asisten una vez a la semana a las sesiones de lectura, son los destinatarios directos de la acción y se constituyen, entonces, en el centro de todo el proceso. El proyecto parte de la concepción de que los niños tienen derecho a acceder a la lectura y, por tanto, habilita espacios en los que la lectura y la conversación les garantizan este acceso, sin obligaciones escolares ni moralizantes. La lectura y la conversación se conjugan en un proceso en el que los niños pueden participar de manera activa, permitiendo una experiencia real que puede impactar en todas las esferas de su vida. Todo lo anterior se conjuga en unimpacto positivo en la transformación de los imaginarios y las representaciones que los niños tienen acerca de la lectura, el libro y la biblioteca.
Aunque hay una clara separación entre la función de los docentes y la de los bibliotecarios dentro del proyecto, durante el proceso se propician relaciones de horizontalidad entre estos dos actores, que generan un trabajo colaborativo entre pares. Los docentes se reconocen como potenciales mediadores de fomento a la lectura, pues pueden participar de manera activa en las sesiones que se realizan y explorar nuevos sentidos frente a la lectura y a la biblioteca. Lo anterior busca que los docentes se vean estimulados a replicar en las escuelas prácticas de fomento a la lectura y de uso de la biblioteca más allá de la realización de tareas o de complemento informativo para exámenes.
Las familias de los niños que participan en el proyecto son actores que se han vinculado al proceso gracias al préstamo domiciliario de materiales de lectura, que se realiza al final de cada sesión. La circulación de materiales ofrece la oportunidad de que los niños y sus familias compartan espacios para leer. Con este nuevo actor se completa el círculo de protagonistas de Biblioteca-Escuela y se espera que, después de participar en el proyecto, los niños y sus familias sigan interesados en hacer uso de la biblioteca y, muy especialmente, de la lectura como ejercicio cotidiano en sus vidas.